El presidente estadounidense, Donald Trump, anunció este lunes que su país retomaría “muy pronto” las negociaciones comerciales con China, país con el que mantiene una guerra comercial desde marzo de 2018 a partir de la imposición de aranceles por parte de ambos países y que ha recrudecido especialmente durante los últimos días
“China nos llamó ayer por la noche. Nos dijo regresemos a la mesa de negociaciones, así que vamos a volver”, dijo Trump a la prensa en la cumbre del G7 en Biarritz, al suroeste de Francia, que culmina este lunes. “Vamos a reanudar las negociaciones muy pronto. Pienso que alcanzaremos un acuerdo”, añadió el magnate republicano.
“Recibimos dos llamadas, dos muy buenas llamadas”, contó Trump a los periodistas luego de días de conflicto y amenazas entre ambos mandatarios. “Quieren un acuerdo”, aseguró el presidente estadounidense al tiempo que elogió a su homólogo chino, Xi Jinping. “Es un gran líder. Entiende cómo funcionan las cosas”, agregó.
En 2018, Trump anunció la intención de imponer aranceles de 50.000 millones de dólares a los productos chinos bajo el artículo 301 de la Ley de Comercio de 1974 argumentando prácticas “desleales” de comercio, a lo que China respondió imponiendo aranceles a más de 128 productos estadounidenses, entre ellos la soja.
Así han transcurrido meses y entre los más afectados resultó la empresa china Huawei por un veto que impuso Donald Trump y que le impediría trabajar con sus clientes estadounidenses por supuestos “riesgos” para la seguridad nacional. Lo último que sucedió en torno a esa problemática fue que Estados Unidos extendió 90 días más la prórroga del veto por lo que podría continuar normalmente durante este lapso.
Sin embargo, la guerra comercial entre las dos mayores potencias mundiales se recrudeció nuevamente este viernes luego de lo que parecía una tregua, pues China anunció otro aumento de sus aranceles sobre los productos estadounidenses, los cuales representan 75.000 millones de dólares en importaciones anuales.
Washington replicó entonces anunciando nuevos aranceles sobre los bienes chinos, que según lo previsto entrarán en vigor en septiembre y diciembre. Esta escalada en la guerra comercial entre China y Estados Unidos ya preocupa a las otras potencias mundiales, inquietas por amenazas de recesión para el próximo año.